Hace unas semanas te hablaba de la próxima publicación de Las locas que no lo eran (As tolas que non o eran en su versión en gallego), y hoy estoy muy emocionada de anunciarte que ¡ya puedes comprar el libro EN ESTE ENLACE!
Está publicado en gallego, pero te aseguro que lo he escrito con un lenguaje muy accesible y que sus historias te van a impactar. ¿Qué vas a poder encontrar en su interior? Básicamente, las cartas, nombres y vidas de las que nunca importaron, las mujeres internas en Conxo, el gran manicomio del noroeste peninsular, entre su fundación en 1885 y la Guerra Civil.
Todas ellas reunían los ingredientes que condenan a una persona al margen: mujeres, aldeanas, pobres, analfabetas. Pero todas ellas tuvieron, sin embargo, el coraje para gritar que la historia no siempre es como nos la cuentan: desde 2021 he estudiado sus casi 500 historias clínicas para ir más allá de las palabras de los médicos y recuperar las historias de cada una a través de sus cartas y palabras, perdidas entre toda esa documentación médica supuestamente aséptica, que sin embargo, cuando la miramos atentamente, deja un resquicio para lo humano.
En este libro vas a encontrar historias como la de Amalia, fumando cigarrillos rubios en el vapor Habana de vuelta a Galicia, como un último gesto de rebeldía antes de ser encerrada; la de María y la carta que envía a su hija, plagada de ternura después de una Navidad en el infierno; también descubrirás la mirada sin esperanza de Elena, a quien imaginas amasando tus manos de nieta y no trabajando en el costurero de un manicomio.
En Las locas que no lo eran vas a descubrir, además, que muchas de estas mujeres, y de ahí el título, no tenían ninguna enfermedad mental que justificase su encierro en un psiquiátrico: algunas eran madres solteras; otras, alcohólicas; había quienes desafiaban a los maridos y quienes hacían maletas para huir de familias que las maltrataban. A todas ellas hacía falta controlarlas, y el manicomio parecía un buen lugar donde encerrarlas, a veces de por vida.
Todas ellas nos regalaron sus miradas a través de las paredes del manicomio y sus palabras para escuchar la voz de las vencidas, incluso en un lugar tan inhóspito como aquel psiquiátrico donde las hacinaban e invisibilizaban. ¿Quieres escucharlas?Compra el libro AQUÍ para tenerlas todas.
Y, por supuesto, si me ayudas a distribuir esta obra para hacer que llegue a cuantas más personas mejor sería genial. Porque lo que queda en las cuentas de la historia también merece ser contado, ¿no te parece?